Este año de voluntariado en Suecia ha sido una experiencia inolvidable para mí. Trabajé en un centro juvenil, realizando actividades con niños, la mayoría en situación de riesgo de exclusión social. La verdad es que conocer sus culturas y sus historias, y haber tenido la oportunidad de compartir un poco de la mía a través de actividades y conversaciones, ha sido increíble.
Además, vivir en Suecia me permitió experimentar muchas cosas nuevas, como la naturaleza, temperaturas de hasta -20 grados, y la gastronomía. Enfrentar el reto de vivir sola en un país extranjero ha sido un desafío en todos los sentidos, pero al mismo tiempo, una experiencia profundamente transformadora.

