¿Por dónde empezar a hablar de estos meses?

Como en los anteriores, sin duda alguna, estuvieron llenos de cosas nuevas, emociones y mucho tiempo junto al resto de voluntarios y personas que forman parte del proyecto.

La otra vez que os escribí, dice que esperaba irme de vacaciones con otras personas, ¡y así fue!

Estuvimos de vacaciones 10 días. Hicimos un hermoso viaje a la Costa Brava. Pasamos los primeros días en Roses, que se encuentra casi en la frontera con Francia, en una hermosa casa con un balcón con vista al mar y con acceso directo – ¡un espectáculo! De hecho, el tiempo justo para dejar las maletas en casa y nos fuimos a nadar con la puesta de sol, ¡preciosa!

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En estos días hemos hecho varias excursiones y caminatas, creo que la mejor parte fue ir a Cap De Creus, que se encuentra cerca de Figueras, una ciudad maravillosa, donde nació Salvador Dalí y donde también está la casa donde vivía, que es ahora un museo. Para ir al Cap De Creus hay que caminar unas 3/4 horas, pero vale la pena, ¡cuando llegas a la cima hay una vista maravillosa de toda la península! Luego para regresar tuvimos que hacer una carrera, porque el último tren era a las 6 de la tarde.  Coline y yo también nos perdimos y nos encontramos en un camino que nos llevaba a otro lado, ¡pero esa es otra historia! ahahahah

En definitiva, pasamos los primeros 5 días en Roses, nadando en el mar, excursiones, estar juntos, cenar juntos o simplemente relajarnos en la playa; en la segunda parte de las vacaciones nos fuimos a Sant Feliu De Guixols, que ya está más hacia Barcelona. En esta segunda parte de las vacaciones solo estábamos yo, Anton, Julia y Nicholas, porque Ricardo tenía que irse a casa y en cambio Coline regresó con su familia a Francia.

Cuando estuvimos en Sant Feliu fueron unas vacaciones súper relajadas:  playa, playa y más playa, sin excursiones, solo tomar el sol y nadar, la primera noche se nos unieron dos amigas, Yasmina y Laura y, en cambio, la última noche, Cristina, una querida amiga de Terrassa, se unió a nosotros!

Esto es en lo que a las vacaciones se refiere, eran realmente necesarias y sobre todo es lindo porque sí, somos un grupo diverso, hay quienes prefieren tomar el sol en la playa todo el día (spoiler: soy yo) o quienes prefieren caminar y andar durante horas, pero nos mezclamos bien y cada uno tiene sus propios espacios. Ciertamente espero tomarme otras vacaciones antes de que finalice el proyecto, pero estoy seguro de que así será !!! Eheheh

¿De qué podemos hablar ahora? Bueno, actualizaciones en el trabajo, eso es muy bueno, finalmente encontré mi espacio y si a veces había dicho que sentía un poco “agobiada”, sé qué esto ya no pasa, ¡por suerte! Disfruto mucho estando con un nuevo grupo que llegó a finales de febrero, que es el grupo de los “abuelos”, por lo que necesitan más ayuda y atención constante. Hacen actividades más tranquilas como la memoria, el color o simplemente ver películas, pero son muy tranquilos y disfruto mucho pasando tiempo con ellos. En cuanto al resto de colectivos siempre va bien, les acompaño a menudo en las salidas que hacen, salimos a pasear o simplemente salidas cerca del centro y me gusta pasar tiempo con ellos incluso fuera del centro.

Por lo demás bastante normal, a menudo nos encontramos con los otros voluntarios de Manresa y también con otros voluntarios aquí en Cataluña, pasamos tiempo juntos en la playa super chill. Y con Nicolás, Julia y Cristina fuimos a Sitges, que me encantó !!! 

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Otra cosa muy importante, ¡probé calcots por primera vez! Se comen con una salsa llamada “romesco”, hecha en su mayoría de almendras y es un alimento típico de Cataluña. Se suele comer en un asado o en principio en una comida llamada “calcotada”! ¡Muy bueno!

Por último, ¡cómo olvidar el día de Sant Jordi, el 23 de abril, una de las fiestas más importantes de Cataluña! En el trabajo fue un gran día de celebración, hicimos muchas actividades, incluida la actividad teatral, donde implementamos la leyenda de Sant Jordi, con diferentes grupos.

 Es todo por hoy,

¡Hasta pronto! 🙂